La Comisión Europea (CE) prohibió la entrada de trigo, maíz, colza y semillas de girasol ucranianos a Polonia, Rumania, Bulgaria, Hungría y Eslovaquia debido a las quejas de que los productos ucranianos se almacenaban en esos países en lugar de ser distribuidos a terceros estados, perjudicando a la agricultura local.
Además, esta situación se vio agravada por la decisión de Rusia de abandonar el acuerdo, el cual facilitaba la exportación de cereal ucraniano a través del mar Negro. En este contexto incierto, la Comisión Europea aseguró este martes que esperará a septiembre para tomar una decisión con respecto a esta prohibición temporal.
Por su parte, el ministro español de Agricultura, Luis Planas, cuyo país ocupa la presidencia rotatoria del Consejo de la UE, indicó, que el análisis de la Comisión se realizará «en agosto» y que la decisión sobre si se prolongan o no los vetos se tomará «más adelante en septiembre».
«Estoy convencido de que en septiembre tendremos que presentar un resumen de todas las circunstancias«, afirmó Wojciechowski, en referencia a los elementos que determinarán si se alargan o no las prohibiciones. Entre las nuevas circunstancias que se deberán tener en cuenta, toma total importancia la decisión de Rusia de abandonar el acuerdo.