El presidente de Chile, Gabriel Boric, promulgó una ley enfocada a defender y proteger a quienes denuncian hechos de corrupción en la administración pública. La medida se da a conocer luego de que uno de los ministros más cercanos al presidente fuera acusado de corrupto.
La promulgación de la ley llegó luego de que una investigación periodística pusiera en aprietos en junio pasado al ministro de Desarrollo Social, Giorgio Jackson, mano derecha de Boric y líder del partido Revolución Democrática.
«Hoy tenemos una buena noticia, estamos promulgando la ley de protección de quienes denuncian hechos de corrupción o faltas de probidad en la administración pública», dijo a la prensa Boric en el Palacio de la Moneda, la sede de la Presidencia.
La ley de Protección al Denunciante, sancionada en junio, busca proteger a funcionarios que sean «testigos o víctimas» de hechos de corrupción y que por diferentes motivos no se atrevan a denunciar, permitiendo «facilitar la detección de casos de corrupción».