Kim Jong-Un no se deja intimidar por las maniobras militares que realizan Corea del Sur y Estados Unidos en estos días. En este contexto, el líder de Pionyang supervisó unos juegos de guerra que tuvieron la particularidad de la exhibición de un nuevo tipo de tanque.
Justamente, el presidente subió a uno de estos coches de guerra, tal como se difundió desde la agencia estatal KCNA durante este jueves. La competencia tuvo como ganadora a la División Acorazada 105, que tiene la particularidad de ser la primera en ingresar a Seúl para derrotarla en el inicio de la Guerra de Corea en 1950.
En un doble mensaje a Corea del Sur, Kim Jong-Un señaló que es “una unidad que carga con la importante tradición e historia de haber ocupado la capital enemiga». Esta actividad se suma a la de la semana pasada por parte del líder norcoreano, que observó maniobras de artillería con fuego real.